LA BOTIJA DE MATÍAS
Antiguamente el dinero, morocotas y libras, se acostumbraban a ser
guardadas en los rincones más oscuros de las casas, constituían siempre una
ocupación para el señor o “maestro, sacarlas de vez en cuando a un sitio
solitario, para clasificarla al sol y extasiarse ante esos fabulosos tesoros.
Las botijas
o entierros que según dicen, se encuentran en algunos lugares de Hernández y
Pueblo Hondo.
En la vega
de Don Matías, al pie de una gran Ceiba se oculta una “paila ” llena de
morocotas, con un Cristo de oro macizo en el centro, para poseer este tesoro
hay que luchar con el muerto tres veces, en la mitad del río Escalante.
En el año
1910, un señor llamado trino Márquez lucho por dos veces, pero fallo en el
último intento. Eran las 12 de una noche fría sin luna, cuando cumplía una
aventura, que según informes fidedignos le costó la vida. El recuerdo de la más
allá…. Las palabras de ultratumba… el Cadáver… Dicen que fue causa de su
muerte.
Cuentan que
en la Plaza Bolívar, precisamente debajo del pedestal, los obreros que
trabajaron en la obra dicen haber encontrado una gran piedra debajo de ella,
que hay otro tesoro enterrado.
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